En las ventas, un closer es una persona que consigue que el cliente compre.
En la seducción un closer es una persona que pide el número de teléfono, le dice a la chica de tener una cita instantánea la besa o se la lleva a casa.
Un closer es alguien que escala la interacción, y que cierra esa fase.
La estrategia esencial para ser un closer en la seducción es la misma que para ser un gran vendedor de cualquier cosa: Creer en tu producto.
Si tienes fe en tu producto, harás todo lo posible para vender.
Si tienes fe en ti mismo, harás todo lo posible para cerrar.